La S.A. Electra-Villenense y Electro Harinera Villenense (Villena)

For a better understanding, we will separate the buildings in chronological order, as the first one already existed in 1896 and the second one was built in 1908.
The first building in Calle Madrid housed the offices, machinery and living quarters of the employees of S.A. Electra Villenense, to which the flour factory was later annexed and which meant the arrival of electricity in Villena.
Of that building only a part of it remains at number 1 of Calle de Madrid. If we continued along this same street to the end, we would have found 8 more houses. Of all these houses, only one remains. The others were demolished to build the large flour factory.

The flour factory was inaugurated on 19 April 1909. The building consists of two transverse pavilions built in solid brick: one of greater height, located in the centre of the building and perpendicular to the tracks, which has four floors and a basement, and the other parallel to the railway tracks and with two floors. This design is linked to the aesthetic principles of the expressive rationalism of the early 20th century to which the architecture of the time resorted.

In 1916, the company extended electric lighting to other towns in the region through the creation of the Sociedad Eléctrica Sax, which produced electricity through a dynamo installed in the Sax Steam Mill.

In 1923, Electro Harinera Villenense, faced with the difficulties that the electricity supply presented, decided to bring energy in the form of alternating current through a waterfall in the river Júcar, which produced 12,000 KW.

In 1927 the S.A. Electro Harinera Villenense was created. During the war of 1936, the owners of this company left Villena and returned to their hometown in France.


In addition to the hydroelectric plant and flour factory, another part of the building was used for the transfer of grain, with a railway line (Madrid, Zaragoza, and Alicante) where they entered their premises and loaded the grain to take it to other places. They also had a farm on the outskirts of the village where they bred cows, chickens, etc. The cow's milk they obtained was sold in a small office next to the entrance to the electrical section.
They also had an ice factory, where they made ice for the fridges in the houses.

In 1950, the investments to maintain electricity production became very expensive and the company decided to sell the electricity business to Hidroeléctrica Española, later known as "La Alcoyana". Little by little, the company's partners sold the other activities.

In 1957, the company began to be used as a cold store for fruit, especially apples. This was a novelty for the farmers and was very successful as there were no refrigerated warehouses in Villena for the preservation of fruit.

Only a single building has survived from the factory. A rectangular building with two floors. On the first floor we can see a central balcony and on both sides two rectangular windows of great simplicity.
At present, the building is in poor condition, with broken windows, fallen ceilings, damaged staircases, etc.

The building is owned by the Town Hall and its intention is to convert it into a large ethnographic and archaeological museum. Over the years, objects have been moved to the old chambers of the Caja de Ahorros del Mediterráneo, owned by the Town Hall.

The future aim of the restoration of the building is to return it to the appearance it had at the beginning of the 20th century. The interior refurbishment will try to accommodate the needs of the museum while respecting the old constructions. The concept of the museum will be based on the history of Villena, and will include the archaeological museum, which will have a permanent exhibition, temporary rooms, laboratory, cafeteria, library, conference room, etc.

The main problem is the state of the building and the current damage to many objects that have been exposed to humidity and neglect.
As the building is over 3000m2, this leads to a problem as it is such a large project that, economically, it is very expensive.

Para mejor comprensión, separaremos los edificios en orden cronológico, ya que el primero ya existía en 1896 y el segundo se construyó en 1908.
El primer edificio de la Calle Madrid, albergó las dependencias, maquinaria y viviendas de los empleados de la S.A. Electra Villenense, al que posteriormente se le anexó la fábrica de harinas y que, supuso la llegada de la luz a Villena.
De aquel edificio sólo queda una parte del mismo en el número 1 de la Calle de Madrid. Si seguíamos por esta misma calle hasta el final, nos hubiésemos encontrado con 8 casas más. De todas estas estas casas sólo se conserva una. Las demás fueron demolidas para construir la gran fábrica de harinas.

La fábrica de harinas se inauguró el 19 de abril de 1909. La edificación consta de dos pabellones transversales construidos en ladrillo macizo a la vista: uno de mayor altura, situado en el centro del edificio y perpendicular a las vías que cuenta con cuatro plantas y sótano y el otro paralelo a las vías del tren y con dos plantas. Este diseño se vincula con los principios estéticos del racionalismo expresivo de principios del siglo XX al que recurre la arquitectura de la época.

En 1916 la empresa extendió el alumbrado eléctrico a otras poblaciones de la comarca a través de la creación de la Sociedad Eléctrica Sax que producía energía eléctrica a través de una dinamo instalada en el Molino Vapor de Sax.

En 1923 le Electro Harinera Villenense, ante las dificultades que el fluido eléctrico presentaba, decide traer energía, en forma de corriente alterna a través de un salto de agua en el río Júcar y que producía 12.00 KW.

En 1927 se crea la S.A. Electro Harinera Villenense. Durante la guerra de 1936, los dueños de esta sociedad abandonan Villena y regresan a su pueblo natal en Francia.

Además de la hidroeléctrica y la fábrica de harina, destinaron otra parte del edificio para el trasiego de grano, con una vía concedida de ferrocarriles (Madrid, Zaragoza, y Alicante) donde entraban en sus dependencias y cargaban el grano para llevarlo a otros lugares. Contaban además con una granja a las afueras del pueblo donde criaban vacas, gallinas, etc. La leche de vaca que obtenían la vendían en un pequeño despacho junto a la entrada de la sección eléctrica.
También tenían una fábrica de hielo, donde lo fabricaban para las neveras que había en las casas.

En 1950 las inversiones para mantener una producción de electricidad se hicieron muy costosas y la sociedad decidió vender la actividad eléctrica a la Hidroeléctrica Española, conocida posteriormente como “La Alcoyana”. Poco a poco los socios de la empresa fueron vendiendo las demás actividades.

En 1957, la empresa se empezó a utilizar como almacén frigorífico de fruta, sobre todo, manzanas. Resultando novedoso para los agricultores y con mucho éxito al no existir en Villena frigoríficos para la conservación de las frutas.

De la fábrica sólo se conserva una única edificación. Un edificio rectangular de dos plantas. En la primera planta podemos observar un balcón central y a sus dos lados dos ventanas rectangulares de gran sencillez.
Actualmente, el edificio se encuentra en malas condiciones, ventana rotas, techos caídos, escaleras estropeadas, etc.

El edificio es propiedad del Ayuntamiento y su intención es convertirlo en un gran museo etnográfico y arqueológico. A lo largo de los años, ha ido llevando los objetos a las antiguas cámaras de la Caja de Ahorros del Mediterráneo, propiedad del Ayuntamiento.

El futuro que se pretende con la restauración del edificio, es devolver el aspecto que tenía a principios del siglo XX. La rehabilitación interior tratará de acomodarse alas necesidades del museo respetando las construcciones antiguas. El concepto del museo partirá de la base de la historia de Villena, y en él entra el museo de arqueología, en el que habrá una exposición permanente, salas temporales, laboratorio, cafetería, biblioteca, sala de conferencia, etc.

El problemas principal es el estado del edificio y el daño actual que tienen muchos objetos que estuvieron expuestos a la humedad y al abandono.
Como el edificio es de más de 3000m2, ello conlleva a un problema ya que es un proyecto de tal envergadura que, económicamente es muy costoso.