Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Riba-roja de Túria< València la Vella
This is the name given to the remains located on a terrace overlooking the river, between the right bank of the River Túria and the Cabrassa ravine, about 3 km southeast of Riba-roja de Túria. Archaeological research has made it possible to determine the Visigothic period and the military purpose of the site. This site, which covers approximately 4 hectares, is characterised by the existence of a powerful wall, 1.80 m wide, which follows the topography of the area and is reinforced by square towers (3 x 3 m) with external projections, both of them made of masonry reinforced with lime concrete.
This site, unique for its characteristics and chronology in the Valencian Community, has been interpreted as a Visigothic fort from the second half of the 6th century. It would form part of the fortifications, strategically located and built around important roads. It would probably be related to the complex period of history when the Visigoth monarch Leovigild reorganised and controlled these territories in response to the Byzantine occupation of the south. It is one of the few examples of Visigothic military architecture in the Valencian Community, and it is one of the best and chronologically oldest identified in the Iberian Peninsula.
Another peculiarity of this site is that it was built on a site of marine Miocene fossils. In addition, during the Spanish Civil War a resistance centre was built formed by galleries, trenches and other structures; therefore, it is not surprising to find elements of the Visigothic wall reused.
In 2016, researches and excavations at the site were continued through collaboration between the Riba-roja de Túria Town Council and the Catalan Institute of Classical Archaeology with the support of the Valencia Provincial Council, Valencia Town Council, the Valencia Museum of Prehistory and the University of Valencia. The project is under the direction of Josep M. Macias Solé (ICAC), Albert Ribera Lacomba (SIAM) and Miquel Rosselló Mesquida. In addition to the excavation work, since 2016 a school of archaeology has also opened, in which students and researchers from several universities from all over the world participate. Among the new findings are ceramics, silos and coins, as well as the wall and indoor enclosure.
Así se conocen las ruinas situadas en una terraza sobre el río, entre el margen derecho del Túria y el barranco de la Cabrassa, a unos 3 km al sudeste de Riba-roja de Túria. Las investigaciones arqueológicas han permitido determinar la cronología visigoda y la funcionalidad militar del yacimiento. Lo característico del lugar, de una superficie aproximada de 4 ha, es la existencia de una potente muralla de 1,80 m de espesor, que se adapta a la topografía del terreno, reforzada por torres de planta cuadrada (3 x 3 m) de proyección exterior, ambas de mampostería trabada con hormigón de cal.
Este yacimiento, único por sus características y cronología en la Comunitat Valenciana, ha sido interpretado como un castro visigodo de la segunda mitad del siglo VI. Formaría parte de las fortificaciones, castra y castella, estratégicamente situadas y articuladas en torno a calzadas importantes. Probablemente estaría relacionada con el complejo momento histórico de reorganización y control de estos territorios por parte del monarca visigodo Leovigildo, en respuesta a la ocupación bizantina del sur. Es uno de los escasos ejemplos de arquitectura militar visigoda, y uno de los mejores y cronológicamente más antiguos identificados en la Península Ibérica.
Otra particularidad de este emplazamiento es que se asienta sobre un yacimiento fosilífero del Mioceno marino. Además durante la Guerra Civil Española se construyó un centro de resistencia formado por galerías, trincheras y nidos de ametralladoras; por lo que no es de extrañar encontrar elementos de la muralla visigoda reutilizados.
En 2016 se retomaron los trabajos de investigación y excavación en el yacimiento a través de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria y el Institut Català d’Arqueologia Clàssica con el apoyo de la Diputación de Valencia, el Ayuntamiento de València, el Museo de Prehistoria de València y la Universidad de València. Este proyecto se encuentra bajo la dirección de Josep M. Macias Solé (ICAC), Albert Ribera Lacomba (SIAM) y Miquel Rosselló Mesquida. Desde 2016, los trabajos de excavación se realizan bajo el formato de curso y escuela de arqueología en el cual participan estudiantes e investigadores de diferentes universidadesde de todo el mundo. Dentro de los nuevos hallazgos destaca las cerámicas, los silos y las monedas, así como el trazado de la muralla y del recinto interior.